
Sipalki es la romanización de la expresión en hangul 십팔기 (hanja: 十八技).
Donde:
십 Sip ó Ship (diez)
팔 Pal ó Fal (ocho)
기 Gui ó Ki (tecnica)
Se utiliza Si Pal Ki para facilitar la pronunciación en español. El significado se podría traducir como “Las 18 Técnicas” (de combate).
En 1789 el rey Jung Jo (hangul: 중 조) dispuso la preparación de un nuevo manual militar conocido como el “Muye Dobo Tongji” (hangul: 무예도보통지, hanja: 武藝圖譜通志,“Completo Manual ilustrado de Artes Marciales”). Luego del éxito contra las campañas japonesas, el entrenamiento militar en Corea decayó debido al aislamiento del país y a la influencia del Confusionismo en los siglos XVIII y XIX. Por ello, las artes guerreras fueron preservadas en el seno familiar, y desempolvadas a consecuencia de la ocupación japonesa de 1910.

Sipalki es la resultante evolutiva de varios elementos militares y de guerra (nacionales y extranjeros), que tomaron contacto con la península de Corea desde épocas, incluso anteriores a la migración de los altaicos (de donde desciende el coreano).

El fin del Sipalki es el de la preservación de la propia vida y del clan. El estilo del Gran Maestro Yoo cuenta en su arsenal con una estrategia de sorpresividad y fiereza, y una amplia variedad de recursos como golpes circulares, desplazamientos a cuarenta y cinco grados, el uso de agarres en conjunción con golpes, la insistencia en practicar contra varios oponentes, y la utilización de los dedos para golpear zonas sensibles con movimientos rápidos, sin olvidar, por supuesto, las técnicas con armas.
En 1592 tuvo lugar la primer gran invasión japonesa a Corea, conocida como Imjin Waeran (hangul: 임진왜란, hanja: 壬辰倭亂, kanji: 文禄の役)
Este arte marcial coreano tiene sus orígenes en las antiguas técnicas de combate que a lo largo de los siglos desarrollaron los pueblos de la península, cuando en su lucha por la supervivencia debían ingeniarse para perfeccionar técnicas que les permitieran sobrevivir cuando se enfrentaban con pueblos invasores.

Todo elemento se constituía en un arma, y cuando no había ninguno, manos y pies desnudos debían ser suficientes para poder conservar la vida, la familia o el territorio.En consecuencia, el rey Sungjo (hangul: 숭조), ordenó a el maestro coreano Han Kyo (hangul: 한쿄) asesorado por militares chinos de la Dinastia Ming (chino tradicional: 大明國; chino simplificado: 大明国, "Imperio del Gran Ming"), que instruyera a un grupo de soldados en técnicas para la guerra (especialmente sable, lanza y lanza de once cabezas).
Estos soldados, una vez graduados, fueron enviados a distintos puntos del país a fin de reclutar y adiestrar soldados en técnicas de armas y arquería, además se les enseñaba a correr, saltar, nadar, bucear, más rudimentos de navegación, estrategia y espionaje. Gracias a esto, la posterior invasión japonesa fracasó.